domingo, 31 de mayo de 2015

Irlanda, en el nombre de la igualdad

Año 11, número 524
Luis-Fernando Valdés

Irlanda se convirtió en el primer país que ha realizado un referéndum sobre el matrimonio homosexual. Unos afirman que fue un triunfo de la igualdad; otros sostienen que fue una derrota para la religión. ¿Quién es el gran perdedor del referéndum?

El pasado 22 de mayo, la República de Irlanda celebró esta consulta popular y la afluencia de votantes fue notoriamente elevada, gracias a la participación de los jóvenes. El resultado fue un “sí” a llamar “matrimonio” a la unión legal de parejas homosexuales. [noticia]
Hay dos situaciones –democracia y religión– que se prestan para una confusión. La primera es que se trata de la primera nación en la que no fueron los legisladores sino los ciudadanos, los que aprobaron esta reforma. La segunda es que se trata de un país considerado como un bastión del catolicismo. Intentaremos poner algunos aspectos en claro.

1) El objeto del referéndum NO FUE aprobar las uniones homosexuales, SINO si se les daba o no el nombre de “matrimonio”. En efecto, el Parlamento irlandés ya había promulgado en 2010 la ley de Relaciones Civiles que concedía reconocimiento legal a las parejas de hecho del mismo sexo, pero eludía calificar a esas uniones de “matrimonio” y protegerlas constitucionalmente.
Esto significa que no fueron los ciudadanos en 2015, sino los legisladores en 2010, los que reconocieron legalmente la unión entre personas homosexuales. No puede pues afirmarse que la mayoría de los ciudadanos fue la que legalizó esta uniones.
Por eso, resulta poco objetivo decir que Irlanda es el primer país en legalizar la igualdad de matrimonios “por el voto de la gente”, como afirmaron vía Twitter algunos homosexuales famosos como Ricky Martin o Ellen DeGeneres. [Noticia]

2) Los ciudadanos irlandeses no votaron sobre la ‘substancia’ de la ley, sino únicamente sobre el ‘nombre’ que se le daría a ese contenido legal. En realidad no les dejaron a los ciudadanos decidir sobre el contenido de la ley de convivencia (que data del 2010), sino sólo en el modo de denominar a estas uniones. De ahí que sea pretencioso anunciar que “el pueblo decidió” sobre este tema, si en realidad sólo le puso nombre.

3) ¿Fue una derrota a la religión? Otro famoso, el líder del grupo irlandés U2, Bono, dio a entender que con este referéndum quedaba atrás la religión, pues declaró que el voto a favor del “sí” al matrimonio gay era un “momento para la verdadera igualdad” en Irlanda, argumentando que el “matrimonio es ahora una idea que trasciende la religión”. [Noticia]
Aunque sea una creencia muy difundida, el matrimonio entre un hombre y una mujer no es una idea judeo-cristiana, sino que es una realidad natural al ser humano. El matrimonio es así no porque lo diga la Biblia, sino que la Sagrada Escritura confirma el plan natural de Dios para todos los humanos.
El matrimonio entre un hombre y una mujer no es una imposición religiosa, sino una exigencia del género humano. Por eso, como expresó el Secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, la reciente aprobación en Irlanda del matrimonio entre personas del mismo sexo “no es una derrota de los principios cristianos, sino una derrota para la humanidad”. [Noticia]

El gran derrotado del referéndum fue –paradójicamente– el principio de igualdad que pretendían defender, porque cuando la ‘igualdad’ se radicaliza, se destruyen las ‘diferencias’ reales entre el hombre y la mujer, y no se alcanza a comprender la ‘complementariedad’ entre ambos. Volvamos al fundamento: igualdad en lo esencial, diferencia en lo complementario.

sábado, 23 de mayo de 2015

Mons. Romero, un santo por descubrir

Año 11, número 524
Luis-Fernando Valdés

Monseñor Romero ya está en los altares. Su figura es usada por grupos de izquierda y es vista con sospechas por parte de sectores de derecha. ¿Cuál es el verdadero Beato Romero? ¿Cuál es el mensaje eclesial de esta beatificación?

Ceremonia de Beatificación de Monseñor Romero.
En la plaza del Salvador del Mundo de la capital salvadoreña, el cardenal Angelo Amato, beatificó a nombre del Papa a monseñor Óscar Arnulfo Romero, asesinado “por odio a la fe” el 24 de marzo de 1980.

1) Ante más de 250 mil personas, Mons. Amato expuso en su homilía el punto de equilibrio para considerar la figura del nuevo beato. Era un Pastor cercano a la gente y querido por su pueblo: “la figura de Romero continúa viva y dando consuelo a los marginados de la tierra”, dijo.
Pero no se trata de un personaje perteneciente a una facción política, ni de izquierda ni de derecha, sino de un guía espiritual de la Iglesia. Amato desmarcó la figura de Romero de la izquierda política, al afirmar que “su opción por los pobres no era ideológica, sino evangélica”. Y la prueba de esto es que “su caridad se extendía a los perseguidores”.

2) Por su parte, el Santo Padre envió una Carta al Presidente de la Conferencia Episcopal de El Salvador (23 mayo 2015), con motivo de esta ceremonia. En ella también se percibe claramente que el Papa le da una interpretación religiosa y no política a esta beatificación.
Francisco enfatiza que Romero fue un pastor (no un político) que guió a su gente, basado en la fe (no en una ideología política): “En tiempos de difícil convivencia, Monseñor Romero supo guiar, defender y proteger a su rebaño, permaneciendo fiel al Evangelio y en comunión con toda la Iglesia”.
El Pontífice subraya que la fidelidad a la doctrina de la Iglesia y la unión con la Iglesia fueron la base desde la que el Beato Romero atendió a los pobres. “Su ministerio se distinguió por una particular atención a los más pobres y marginados”, escribió.
El Santo Padre insistió luego en la misma idea. La cercanía de Romero con la gente (“la capacidad de ver y oír el sufrimiento de su pueblo”) fue posible por su comunión con la Iglesia: “la voz del nuevo Beato sigue resonando hoy para recordarnos que la Iglesia, convocación de hermanos entorno a su Señor, es familia de Dios, en la que no puede haber ninguna división”.

3) Para descubrir a Monseñor Romero, es importante identificar lo que es real y lo que es manipulación. Recomiendo leer a Federico Hernández Aguilar, un intelectual de prestigio, que es un experto en la vida del nuevo beato.
En una entrevista reciente (22 mayo 2015), Hernández Aguilar explicar que luego de su asesinato, “él comienza a ser muy manipulado, sobre todo por la izquierda más radical del país, y eso también pesó en contra de su imagen para muchos salvadoreños”.
Y añade que Mons. Romero fue además “muy enfático, primero al decir que no estaba a favor del marxismo, pero además que la violencia radicalizada por las ideas marxistas no conducían a nada bueno”.
Hernández Aguilar también explica que Romero “fue muy tergiversado. Él mismo además lo denunciaba, él decía ‘no tergiversen mis palabras, por favor consignen las cosas que he dicho y cómo las he dicho’.” Es falsa la frase que le atribuyen: “Si me matan, resucitaré en el pueblo salvadoreño”.

Esta beatificación es un regalo de Dios para la Iglesia Católica latinoamericana, que nos pone como punto de referencia al Obispo Óscar Arnulfo Romero como modelo de pastor comprometido con su gente en momentos históricos turbulentos. Pero debemos buscar al beato Romero de verdad: al Pastor comprometido con el Evangelio y con la unidad.

domingo, 17 de mayo de 2015

“Turismo reproductivo”

Año 11, número 523
Luis-Fernando Valdés

Las imágenes del terremoto de Nepal conmovieron al mundo. Pero junto a los escombros de las casas y edificios, se descubrió algo no menos aterrador: que ese país favorece la renta de útero de sus mujeres jóvenes.

Mujeres y niños damnificados por el reciente
terremoto en Nepal (foto: 
noticias.terra.cl).
El escándalo se destapó porque el mismo día de aquel terremoto, el periódico israelí Ynetnews informó que el ejercito rescataría a varias parejas homosexuales, que habían viajado a Nepal para recoger a 24 bebés nacidos unas semanas antes de madres de alquiler. Los habían encargado allí porque en Israel la subrogación [renta de úteros] está reservada sólo a las parejas heterosexuales.

Nepal se ha convertido en uno de los destinos favoritos del “turismo reproductivo”, desde que la India adoptó algunas restricciones a la renta de úteros en 2013, que incluyen el veto a los homosexuales.

Además, los precios de estos “servicios” en Nepal son parecidos a los de la India: unos 6,000 dólares (que se reparten entre las clínicas, los intermediarios y la familia de la madre sustituta, la cual no siempre ve el dinero), respecto a los 150,000 dólares que cuesta en los Estados Unidos.

Una nota del semanario Nepali Times, publicada pocos meses antes del terremoto (30 enero 2015), explica que, en esos dos países, hay un nexo entre los políticos y los hospitales en lo referente a la subrogación.

Y añade que “es una cuestión de oferta y demanda: Hay demanda de bebés en los países ricos, y suficientes familias pobres en los países en desarrollo, que a veces fuerzan a las mujeres para que se conviertan en madres sustitutas”.

Pocos días después, el 11 de mayo, fue lanzada la iniciativa “Stop Surrogacy Now” (‘Detengan ya la subrogación’), patrocinada por 16 organizaciones y más de 100 personas de 18 países, de diversas culturas y religiones, que pide que se ponga fin a “la explotación de mujeres y el tráfico humano de niños mediante la subrogación”.

En su manifiesto, esta organización valora el deseo de paternidad y maternidad de muchos, pero sostiene que esos deseos no deben sobrepasar los límites, y describe algunos de los abusos que se comenten, como los siguientes:
  • Se explota “a mujeres de bajos recursos, que harían lo que sea por generar dinero”; se les hace la propuesta pero no se les da información “sobre los riesgos a corto y largo plazo que su cuerpo puede sufrir”.
  • “El proceso médico para la subrogación trae consigo riesgos tanto para la madre subrogada, como para la madre genética, y el embrión que es sometido a técnicas de reproducción asistida”.
  • “Los niños creados por medio de tecnologías de reproducción asistida, como la subrogación, también se enfrentan a riesgos de salud que incluyen: parto prematuro, muerte fetal, bajo peso al nacer, anomalías fetales, y presión arterial alta”.
  • “Un embarazo subrogado rompe intencionalmente el vínculo materno natural que se produce en el embarazo. Dicho vínculo biológico entre madre e hijo es innegablemente íntimo, y al ser interrumpido, se crean repercusiones duraderas en ambos lados”.
Entonces, se trata de defender a las mujeres de la explotación y a los niños de ser tratados como objetos comerciales. Por eso, es importante afirmar que un hijo no es un “deseo” a conseguir o una “meta” por alcanzar, sino fruto del amor de sus padres en el seno de una familia.
Los daños físicos y psicológicos, tanto del niño como de la madre de alquiler, hacen ver que en este tema no caben los argumentos de género (como el derecho de una pareja de homosexuales a tener un niño), ni del derecho a la paternidad de una persona soltera.

sábado, 9 de mayo de 2015

Mensajes del Papa a las madres

Año 11, número 522
Luis-Fernando Valdés

Día de las madres. Una fecha muy esperada para acompañar a nuestras mamás, y mostrarles nuestro cariño con regalos. Por eso, hoy les compartimos con afecto unos mensajes del Papa Francisco que elogian el papel de las madres.

1) Las mamás son generosas. Nuestra cultura valora el papel del sujeto y su responsabilidad; pero en la práctica, solemos caer en el individualismo cuando exageramos un poco el hecho de que “individuo” quiere decir “que no puede ser dividido”.
Ante esta realidad, el Papa comenta que “las madres son el antídoto más fuerte a la difusión del individualismo egoísta”. En cambio, explica el Pontífice, “las madres se ‘dividen’, desde cuando acogen un hijo para darlo al mundo y hacerlo crecer”; es decir, la mamás sabe salir de sí mismas y dar cabida en su interior a los demás.

2) La mamás dan testimonio del valor de la vida humana. Francisco alguna vez dijo que suele pensar en la madres que reciben la noticia de la muerte de un hijo caído en una guerra. Y añadió que por esa razón, “son ellas, las madres, quienes odian mayormente la guerra, que mata a sus hijos”.
De ahí que el Santo Padre se haga cargo del dolor de una madre que ha perdido a su hijo, y lleno de compresión pueda afirmar: “¡Pobres mujeres, cómo sufre una madre! Son ellas quienes testimonian la belleza de la vida”.
Por eso, en este día festivo también caben las lágrimas de recuerdo por los hijos que partieron a la otra vida, y es importantes manifestarles a esas madres nuestro afecto y solidaridad.

3) Una entrega silenciosa. Al inicio de este año, el Pontífice habló del valor del esfuerzo que realizan las mamás para criar y educar a sus hijo. El Papa tomó unas palabras del futuro beato, el Arzobispo salvadoreño Oscar Arnulfo Romero, que decía que las madres viven un “martirio materno”.
El Santo Padre recordaba unas palabras de este Obispo mártir, que explicaba que “dar la vida no es sólo que lo maten a uno; dar la vida, tener espíritu de martirio, es dar en el deber, en el silencio, en la oración, en el cumplimiento honesto del deber, en aquel silencio de la vida cotidiana, ir dando la vida, como la da la madre que sin aspavientos, con la sencillez del martirio maternal concibe en su seno a su hijo, da a luz, da de mamar, hace crecer, cuida con cariño a su hijo. Es dar la vida – y éstas son las madres. Es martirio”.

4) Una Mamá desde el Cielo. La maternidad es un puente entre el Cielo y la Tierra, porque Dios mismo se atribuye sentimientos maternales hacia el Pueblo de Israel (cfr. Isaías 49,15; Mateo 23,37). Además, Jesús encomendó a su propia Madre, María de Nazaret, el cuidado maternal de la naciente Iglesia (Juan 19,26-27).
Por eso, el papel materno de la Virgen María es tanto un punto de referencia para todas la mamás cristianas como un motivo de esperanza y de confianza en obtener la ayuda divina para sus hijos.
Explica el Obispo de Roma que “María ha vivido muchos momentos no fáciles en su vida, desde el nacimiento de Jesús, cuando para ellos ‘no había lugar para ellos en el albergue’ (Lc 2, 7), hasta el Calvario (cfr. Jn 19, 25). Y como una buena madre está cerca de nosotros, para que nunca perdamos el valor ante las adversidades de la vida, ante nuestra debilidad, ante nuestros pecados: nos da fuerza, nos muestra el camino de su Hijo.”

Con estas reflexiones del Santo Padre felicitamos a todas las mamás, y a todas las mujeres que cuidan a chicos y grandes como si fueran hijos suyos, y les deseamos todas las bendiciones del Cielo.

domingo, 3 de mayo de 2015

Teología de la liberación según Francisco

Año 11, número 521
Luis-Fernando Valdés

Francisco pide que, en el próximo concierto de beneficencia en el Vaticano, los indigentes de Roma estén en primera fila, en los lugares habitualmente reservados a las autoridades. Es un gesto inusual que refleja la prioridad del Papa por los pobres. ¿Es esto un relanzamiento de la Teología de la liberación?

El Papa recibe a un grupo de indigentes a los que había invitado
a conocer la Capilla Sixtina (26 marzo 2015).
La llamada “revolución” del Papa latinoamericano es muy particular, porque el Santo Padre no hace sino dar continuidad al mensaje social cristiano, que ha estado presente en la Iglesia desde León XIII y que ha sido reafirmado por el Concilio Vaticano II.

Sin embargo, los gestos del Papa hacia personas concretas han sido “novedosos”, hasta el punto que algunos medios católicos sostuvieron que Francisco “tiene estrechos lazos con la teología de la liberación” (The Tablet, 2 mayo 2014) o que bajo su pontificado “la teología de la liberación llega a su mayoría de edad” (Catholic News Service, 23 septiembre 2013).

Ciertamente, en América Latina había que hacer algo por los pobres. Y la vía que algunos propusieron fue la Teología de la Liberación, que utilizando el sistema de Karl Marx, ponía en planos antagónicos a los ricos y a los pobres: que se acabara con los pudientes, para que su capital se distribuyera entre los pobres.

Esta propuesta deslumbró, pero no es cristiana, pues la violencia no es la doctrina de Jesucristo. De manera que la tarea de ayudar con amplitud a los pobres seguía pendiente, y el Papa, desde su época de cardenal de Buenos Aires, hizo su “revolución” pacífica: la de estar junto a los indigentes y ayudarlos de manera práctica y eficaz.

Francisco no sigue el liberacionismo, sino directamente el Evangelio. Insiste en que fundamento de esta ayuda a los necesitados es Cristo, que se hace presente en los desvalidos. Jesús mismo dijo que cada vez que alguno presta ayuda  a los necesitados, “a mí me lo hace” (Mateo 25,40).

El Pontífice lo explica de una manera muy gráfica, con la frase “tocar la carne de Cristo” en el pobre. Recientemente, afirmó: “¡Cuánto quisiera que se tocara la carne de Cristo presente en los necesitados de esta ciudad!” (Aleteia, 29 abril 2015)

Ahora, desde la Sede de Pedro, el Papa argentino continúa atendiendo a los pobres que le están más cercanos: los indigentes de Roma, que deambulan en los alrededores de la Ciudad del Vaticano.

Además de darles dinero (14 abril 2105), el Santo Padre ha compartido el desayuno del día su propio cumpleaños con cuatro indigentes (17 diciembre 2013). A los llamados “sin techo”, les mandó construir regaderas junto a la Plaza de San Pedro (6 febrero 2015) y les facilitó que ahí también puedan cortarse el cabello (16 febrero 2015).

Todo eso nos lleva a dos reflexiones: 1) Francisco nos propone un modo nuevo –no político ni liberacionista, sino bíblico– de entender la pobreza. Consiste en llevar de modo práctico y sin retórica la “ternura de Cristo” a los hermanos que tienen necesidades materiales.

2) El Papa hace cosas prácticas por los pobres y comparte su vida en el Vaticano con ellos. De esta manera, la máxima Autoridad de la Iglesia pone el ejemplo de “tocar a los pobres”, de estar con ellos. Esto nos lleva a todos a examinarnos, si esta fraternidad directa con los necesitados es parte de nuestra vida cristiana, como lo son nuestras devociones diarias.

El Santo Padre ha superado así la brecha entre pobres y ricos, con una revolución pacífica, que es la de Cristo en el Evangelio. Ahora nos corresponde a los demás, transitar por este puente de la ternura y la caridad, para encontrarnos con la carne Cristo presente en los pobres del cuerpo y del alma.