viernes, 26 de agosto de 2016

Benedicto XVI revela por qué renunció

-->
Año 12, número 590

Luis-Fernando Valdés



El Papa emérito, cada vez más anciano, explicó los motivos que lo llevaron a dejar el Pontificado. Más allá de lo coyuntural, como su frágil salud, esta renuncia encierra un significado importante para nuestra época, que necesitamos descubrir.



Entrevistado por Elio Guerriero, Benedicto XVI
confirmó que su frágil salud fue la causa de su renuncia.
(Foto: www.iltimone.org)
1. Una entrevista. El conocido teólogo italiano Elio Guerriero, que ha tenido una relación cercana con Benedicto XVI porque ambos trabajaron en el proyecto de la importante revista “Communio” y porque Guerriero ha sido editor de muchas de sus obras, entrevistó al Pontífice emérito (La Reppublica, 24 ago. 2016; en español: ReL, 25 ago. 2016).

Guerriero conversó con Benedicto sobre los motivos de su renuncia. No hubo sorpresas, porque las razones desde hace tiempo habían sido comentadas por sus colaboradores cercanos; pero ahora ha sido el mismo Pontífice emérito quien corroboró con sus propias palabras esa información.



2. Una frágil salud ante unos grandes compromisos pastorales. Benedicto XVI explicó que tenía en el horizonte “numerosos compromisos que consideraba que no podría completar”, como la JMJ de Río de Janeiro 2013, ante la cual no podía limitarse a una participación televisiva, ya que un evento así hacía precisa la presencia del Papa. Por eso, explicó, ésta “era una circunstancia por la cual la renuncia era para mí un deber”.

Contó que durante su viaje a México y Cuba, “experimenté con gran fuerza los límites de mi resistencia física. Sobre todo, me di cuenta de que ya no estaba en disposición de afrontar un futuro vuelo transoceánico por los problemas del huso horario”.

Después de hablarlo con su médico, “se hacía evidente que ya no podría participar en la Jornada Mundial de la Juventud de Río de Janeiro en el verano de 2013, se oponía claramente el problema del huso horario”.  

Y así llegó a la conclusión que debía renunciar, y que eso debía ser muy pronto. “Desde entonces –afirmó el Papa emérito– tuve que decidir en un tiempo relativamente breve sobre la fecha de mi renuncia.”



3. De fondo: confianza en Dios. Lo que más que llama la atención de la entrevista no es tanto el motivo de la renuncia al Pontificado, sino la fe y la confianza en Dios de Benedicto ante un futuro complejo. Para él, “en una situación de crisis, la mejor actitud es ponerse delante de Dios con el deseo de reencontrar la fe para poder proseguir el camino de la vida”.

Contó que cuando aceptó el Pontificado era consciente de sus límites. “Me daba cuenta de que todo aquello que tenía que hacer no podía hacer hacerlo yo solo, y de este modo estaba casi obligado a ponerme en manos de Dios, a confiar en Jesús”, dijo.

Benedicto está convencido que “al Señor le agrada acoger nuestro deseo de darnos las luces que nos guían en el peregrinaje de la vida”, y por eso tenía la firme convicción de que mi sucesor –como así ha sucedido- llevaría igualmente al buen fin querido por el Señor la iniciativa que yo había comenzado”.



Estas declaraciones de Benedicto XVI confirman que su frágil salud fue la causa de su renuncia al Ministerio petrino y, a la vez, muestran la grandeza de espíritu de un hombre que supo aceptar sus límites, porque entendió que grandeza de Dios guía su vida y su misión.

La renuncia del Papa alemán no es un mero hecho administrativo o un dato curioso, sino un mensaje a todos las personas de hoy que nos enfrentamos a un futuro político, social y económico incierto: Dios realmente guía nuestro futuro y por eso, si nos fiamos de Él, podemos avanzar en la Historia con confianza.




sábado, 20 de agosto de 2016

¿Qué pensar de la reciente Reforma vaticana?

-->
Año 12, número 589

Luis-Fernando Valdés



El Papa Francisco erigió un nuevo Dicasterio y así inicia la esperada reforma de la Curia vaticana. Pero este movimiento, ¿tiene algo que ver con la vida diaria de los fieles católicos?



El Papa Francisco nombró a Mons. Kevin Farrell
como Prefecto del nuevo Dicasterio para la vida,
la familia y los laicos. (Foto: keranews.org)
1. Antecedentes. Desde el inicio de su Pontificado, Francisco creó un consejo de cardenales, conocido hoy como “C9” pues está compuesto por nueve purpurados, con el objetivo de estudiar una reforma a fondo de la Curia romana.

Desde hace meses se anunció que se fusionarían algunos Consejos e Institutos pontificios. Lo importante de esto es tener claro que se trata de una reforma del aparato administrativo del Vaticano, pero no de la estructura sobrenatural de la Iglesia católica.



2. Un nuevo organismo para laicos. Mediante el Motu Proprio titulado “Sedula Mater” (‘Madre solícita’), publicado el 15 de agosto pasado, Francisco instituyó el nuevo Dicasterio de Laicos, Familia y Vida. En ese documento, el Papa explica que esta reforma sirve para que los dicasterios se “conformen a las necesidades de nuestro tiempo y se adapten a la necesidad de la Iglesia Universal”.

El nuevo organismo unificará el Pontificio Consejo para la Familia y el Pontificio Consejo para los Laicos que, a partir del 1 de septiembre, desaparecerán y pasarán a formar parte de este nuevo Dicasterio. (Rome Reports, 6 ago. 2016)



3. El nuevo prefecto. Francisco puso al frente del nuevo organismo al obispo de Dallas (EUA), mons. Kevin Farrell, cuyo hermano, Brian, es el Secretario del Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad Cristiana.

Mons. Farrell, mediante un comunicado en la web de la diócesis de Dallas, declaró que espera “formar parte de la importante labor de la Iglesia universal en la promoción del laicado y su apostolado para el cuidado pastoral de la familia y apoyo a la vida humana de acuerdo a la reciente exhortación apostólica del Papa, ‘Amoris Laetitia’.”



4. Para qué servirá el nuevo dicasterio. El nuevo organismo tendrá como finalidad la promoción del laicado, el cuidado pastoral de la familia y dará apoyo a la vida humana. Como indicó el Papa en el Motu Proprio “nuestro pensamiento se dirige a los laicos, la familia y la vida, a quienes queremos ofrecer apoyo y ayuda, porque son testigos activos del Evangelio en nuestro tiempo y una expresión de la bondad del Redentor”.

Según sus estatutos, “el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida es competente en asuntos relacionados a la Sede Apostólica con respecto a la promoción de la vida, el apostolado de los fieles laicos, el cuidado pastoral de la familia y su misión de acuerdo al plan de Dios y para la protección y el apoyo de la vida humana. (Statutes, Art. 1)

Como es lógico, el nuevo departamento tendrá que definir sus políticas y metas específicas en los próximos meses. Sin embargo, el mensaje que Francisco envía con la creación de este dicasterio es clara: la estructura de los organismo centrales de gobierno de la Iglesia Católica deben estar en función de las necesidades actuales de los fieles.

Se podría decir que esta reforma estructural de la Curia romana es como una nueva aplicación del “aggiornamento” (‘puesta al día’) de la Iglesia, que el Papa San Juan XXIII buscaba cuando convocó el Concilio Vaticano II.



Este nuevo Dicasterio tendrá mucho que ver con los fieles católicos, porque sus objetivos están enfocados a lo más importante de la realidad cotidiana de ellos: la vida, la familia y la misión de los laicos en la Iglesia.


viernes, 12 de agosto de 2016

¿Qué nos aportan los pueblos indígenas?

-->
Año 12, número 588

Luis-Fernando Valdés



Se celebró el Día Internacional de los Pueblos Indígenas. Todos estamos de acuerdo en que debemos respetarlos y a ayudarlos en su desarrollo, pero ¿estamos dispuestos a aprender de ellos?



Una niña indígena mexicana, en la Misa de Francisco
en San Cristobal de las Casas (15 feb. 2016)
(Foto: radiovaticana.va // AFP)
1. Celebrando a los pueblos indígenas. El pasado día 9 de agosto, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) conmemoró el Día Internacional de estos pueblos. El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, dio un mensaje con motivo de esta conmemoración y exhortó a los Gobiernos a “mejorar el acceso a la educación para los pueblos indígenas” y les pidió “que reflejen las experiencias y la cultura de esos pueblos en los lugares de aprendizaje”.

El Papa Francisco se unió a esta celebración y expresó a través de su cuenta en Twitter una petición de que los pueblos indígenas sean respetados, “ya que están amenazados en su identidad y hasta en su misma existencia”. (@Pontifex_es, 9 ago. 2016)



2. Una nueva visión de los indígenas. No es la primera vez que Francisco defiende a los Pueblos indígenas. Además, el Papa ha ido más allá de una mera solidaridad hacia ellos, pues los considera como quienes “tienen mucho que enseñarnos, que enseñar a la humanidad”.

De esta manera el Pontífice desafía varios prejuicios modernos. Algunos de ellos, referentes al medio ambiente, pues la mentalidad industrializadora –a nombre del progreso–  considera tanto que se puede romper la armonía de la naturaleza como que los pueblos que viven en contacto con ella están condenados al subdesarrollo.

Por eso, en su visita a México, Francisco para defender el medio ambiente, pidió que aprendamos de estos pueblos, pues ellos “saben relacionarse armónicamente con la naturaleza, a la que respetan como “fuente de alimento, casa común y altar del compartir humano”. (Homilía, 15 feb. 2016).



3. De la exclusión a la interculturalidad. La relación de los pueblos indígenas latinoamericanos con los Estados dentro de los cuales viven es complicada,  porque estos pueblos tienen una cultura y lenguas propias, pero a la vez pertenecen a naciones consolidadas, en las que viven.

Las soluciones que muchas veces se proponen son poco integradoras: desde el exterminio cultural hasta el aislamiento territorial. El Santo Padre propone una vía de armonía, en la que la pluralidad no rompa la unidad.

Así, en Bolivia, Francisco animó al movimiento indígena latinoamericano a “buscar la conjunción de sus pueblos y culturas”. A esa conjunción el Papa la llamó “poliedro”: “una forma de convivencia donde las partes conservan su identidad construyendo juntas una pluralidad que no atenta, sino que fortalece la unidad”. (Discurso, 9 jul. 2015)

Para el Papa ese “poliedro” es la clave para que en un mismo territorio vivan juntas dos culturas, sin dar lugar a la ruptura territorial. Por eso, según Francisco, la “búsqueda de esa interculturalidad que combina la reafirmación de los derechos de los pueblos originarios con el respeto a la integridad territorial de los Estados nos enriquece y nos fortalece a todos”. (Ibídem)



El fenómeno de la globalización ha conllevado serios problemas como el daño ecológico causado por una explotación frenética de los recursos naturales de los países pobres, y como la difícil integración de las culturas indígenas en las sociedades modernas.

El Papa Francisco ha dado un paso adelante al reconocer el importante papel que deben jugar los pueblos indígenas en la cultura contemporánea y al ponerlos como modelo de respeto a la “casa común” y de integración cultural. Tenemos pues mucho que aprender de ellos.




domingo, 7 de agosto de 2016

Francisco denuncia “colonización ideológica”

-->
Año 12, número 587

Luis-Fernando Valdés



Se filtra un comentario del Pontífice hecho a puerta cerrada. Francisco mostró su desacuerdo en que se enseñe a los niños a escoger su sexo. ¿Por qué hace esta declaración un Papa que se ha mostrado abierto hacia las personas homosexuales?



Francisco con los obispos de Polonia.
(Foto: Zenit.org)
1. La noticia. El periódico italiano "La Stampa" publicó que durante su encuentro en Cracovia con los obispos polacos el 27 de julio pasado, el Papa afirmó que "en Europa, en América, en América Latina, en África, en algunos países de Asia, hay verdaderas colonizaciones ideológicas; y una de éstas, lo digo claramente con 'nombre y apellido', es la teoría de género".

Francisco señaló que "hoy a los niños se les enseña esto en la escuela: que cada quien puede elegir el sexo. ¿Y por qué enseñan esto? Porque los libros son los de las personas y de las instituciones que te dan el dinero; son las colonizaciones ideológicas, apoyadas también por países muy influyentes y esto es terrible". (Télam, 26 jul. 2016)



2. Qué es la “colonización ideológica”.  No es la primera vez que el Pontífice emplea esta expresión.  Durante su viaje apostólico a Flilipinas, el 19 de enero del  año pasado, Francisco en un acto con familias explicó a qué se refería. 


"¿Por qué digo colonización ideológica? Porque toman, toman la necesidad de un pueblo o la oportunidad de entrar y hacerse fuertes, (con libros de texto) para niños. Pero esto no es una novedad. Lo mismo hicieron las dictaduras del siglo pasado. Entraron con su doctrina. Pensad en los Balilla, pensad en la Juventud Hitleriana”. [L'Opera Nazionale Balilla fue una organización juvenil fascista italiana. N.d.T.] 

Allí recordó que, durante el Sínodo de 2014, los obispos africanos denunciaron una "colonización ideológica” de su continente. Dijeron que algunos organismos internacionales condicionaban ayudas a cambio de cambios en legislaciones sobre el control de la población o matrimonio entre personas homosexuales. (Rome Reports, 26 mayo 2015)


En la práctica, en los países de América Latina y de África se ha dado una tendencia a aprobar leyes e iniciativas para el pueblo pero sin el pueblo, impulsadas por una minoría que regula y pretende cambiar la concepción  de matrimonio. (Family&Media)



3. Peligro de pérdida de la propia idéntidad. De regreso a Roma de aquel viaje a Filipinas, el Papa explicó que ese nuevo colonialismo es destructivo. “Una persona entra con una idea que no tiene nada que ver con la nación. Y ellos colonizan al pueblo con una idea que cambia, o quiere cambiar, una mentalidad o una estructura”, explicó.
Y añadió: “Lo mismo fue hecho por las dictaduras del último siglo. Ellos entraron con su propia doctrina”. “Pero cuánto sufrimiento. Los pueblos no deben perder su libertad”, constató.


Ahí mismo subrayó que “cuando las condiciones son impuestas por colonizadores imperiales, buscan hacer que las personas pierdan su propia identidad y hagan una uniformidad”.



¿Por qué hizo Francisco esta declaración? Evidentemente no es un gesto contra las personas homosexuales. Es más bien una denuncia contra una ideología -la teoría del género-, que se quiere imponer a fuerza en los países pobres. 

      Se trata de una declaración valiente, que desafía a gobiernos e instituciones internacionales, para defender a las familias y a la libertad de los pueblos de una nueva forma de colonización: la invasión ideológica.